Siga estos pasos para detener una hemorragia (sangrado) nasal:

• Suénese la nariz con cuidado para eliminar cualquier coágulo de sangre.
• Siéntese erguido e incline la cabeza ligeramente hacia adelante.
  • Importante: No eche la cabeza hacia atrás. Esto puede hacer que corra sangre por detrás de la garganta, y podría tragarla. Tragar sangre puede irritarle el estómago y causar vómito. Además, el vómito podría hacer que el sangrado empeore o que comience nuevamente. Escupa la sangre que se acumule en la boca y en la garganta en lugar de tragarla.
• Use los dedos pulgar e índice para apretarse firmemente la parte blanda de la nariz. La nariz comprende una parte dura y huesuda y una parte más blanda hecha de cartílago. Las hemorragias nasales suelen ocurrir en la parte blanda de la nariz. Rociar la nariz con un aerosol nasal descongestionante como oximetazolina (Afrin) antes de aplicarse presión puede ayudar a detener una hemorragia nasal. Sea prudente con los medicamentos. Lea y siga todas las indicaciones de la etiqueta. Tendrá que respirar por la boca.
• Siga apretándose la nariz por al menos 5 minutos. Use un reloj para cronometrar los 5 minutos. Puede parecer mucho tiempo. Resista las ganas de echar un vistazo cada pocos minutos para ver si la nariz le ha dejado de sangrar.
• Fíjese si la nariz le sigue sangrando después de 5 minutos. Si ese es el caso, apriétesela por 10 minutos más. La mayoría de las hemorragias nasales se detendrán después de 10 a 20 minutos de aplicar presión directa.
• Aplíquese una capa fina de gel nasal a base de solución salina o de agua, como NasoGel, o una crema nasal antiséptica dentro de la nariz. No se suene la nariz ni introduzca nada más dentro de la nariz por varias horas después de que la hemorragia se haya detenido.
• Descanse tranquilamente por algunas horas.