Generalidades

Se puede usar una variedad de almohadillas para tratar o prevenir callos y helomas (ojos de gallo). Las almohadillas protectoras amortiguan el callo o heloma o mantienen el pie y los dedos en una posición más cómoda para que no se formen callos ni helomas.

Puede comprar almohadillas protectoras en diferentes tamaños y formas, o comprar láminas de material que puede cortar para satisfacer sus necesidades.

Molesquín es una tela suave con una fina capa de fieltro unida a un respaldo adhesivo. Se usa con mayor frecuencia en los pies para proteger la piel del roce contra el calzado o contra sí misma. También puede ayudar a amortiguar los pies.

Estas son dos maneras de usar los parches para durezas (molesquín):

• Para callos y helomas más pequeños, corte un círculo del parche y luego corte el centro del círculo para tener una almohadilla en forma de rosquilla. Coloque la parte posterior adhesiva sobre la piel de manera que el callo o heloma quede en el "agujero" de la rosquilla y la almohadilla lo rodee.
• Para callos más grandes en la región metatarsiana del pie, use almohadillas protectoras. Coloque la almohadilla de modo que se extienda hasta el borde del callo, pero no lo cubra. Esto se puede hacer para uno o más callos con una almohadilla. Esta almohadilla transfiere el peso lejos del callo. Esta almohadilla a menudo se conoce como almohadilla metatarsiana.

Otras almohadillas que se pueden usar para callos y helomas incluyen:

Si tiene diabetes, arteriopatía periférica, neuropatía periférica u otras afecciones que causan problemas circulatorios o entumecimiento, consulte con el médico antes de probar cualquier tratamiento para callos o helomas.